Pamela Cruz. Península 360 Press [P360P]
Las tasas de desempleo han registrado niveles extraordinariamente altos durante la pandemia, afectando más a las comunidades de inmigrantes y afrodescendientes, y se espera que en los próximos meses exista un aumento relacionado con un mayor número de casos por COVID-19.
De acuerdo con un informe del Instituto de Política Fiscal –FPI, por sus siglas en inglés–, el promedio de la tasa de desempleo durante el tercer trimestre de 2019 fue de 4.0 por ciento, mientras que para julio de este año registró un nivel máximo de 16 por ciento.
Y aunque la tasa bajó a 9.0 por ciento en octubre, mucho menos que lo observado en julio, sigue siendo más del doble del promedio observado en 2019, «una señal preocupante de que en los meses futuros puede haber un aumento en lugar de una disminución en el desempleo».
El instituto indicó que todos los grupos se han visto profundamente afectados por la recesión a causa de la pandemia por COVID-19; sin embargo, los inmigrantes y los afrodescendientes se ubican entre las personas más afectadas.
Pero los inmigrantes indocumentados pueden llegar a ser de los sectores más afectados, puesto que se quedan al margen de programas de apoyo por parte del gobierno, como el sistema de seguro de desempleo, el cual puede ayudar a los trabajadores en tiempos difíciles.
Por ejemplo, al comparar el tercer trimestre de 2020 con el mismo periodo del año anterior en el estado de Nueva York, se puede observar que la tasa de desempleo general fue del 13 por ciento, más del triple que lo registrado en 2019.
Sin embargo, existe una diferencia notable si se analiza por grupos. Para las personas caucásicas, la tasa de desempleo fue del 10 por ciento, para los afrodescendientes del 13 por ciento y para las personas de la comunidad latina, la tasa fue del 19 por ciento.
«Hay buenas razones para pensar que los inmigrantes indocumentados han sido los más afectados, ya que también se quedan sin muchos de los apoyos con los que otros trabajadores pueden contar en tiempos difíciles, como el seguro de desempleo o el seguro de salud».
El informe del FPI añadió que, en tanto no existe una medida directa del desempleo entre los trabajadores indocumentados, si se observan las industrias en las que los inmigrantes indocumentados se desempeñan, se puede obtener una idea del mercado laboral al que se enfrentan.
Y es que, por un lado, los trabajadores indocumentados se concentran particularmente entre los trabajadores esenciales en supermercados, transporte público, servicios de entrega y atención médica.
Por otro, los inmigrantes también se concentran en las industrias que han visto la mayor pérdida de empleo, como restaurantes y hoteles, es decir, en puestos de trabajo que no han podido continuar relativamente tranquilos sus actividades desde casa.
A ello se suma que el mayor descenso de puestos de trabajo en el tercer trimestre de 2020 en comparación con el año anterior se dio en sectores como entretenimiento y ocio –46%–, así como en los servicios de alojamiento y alimentación –40%–.
De tal forma, recomendó que los fondos federales que llegan a los estados sean lo suficientemente flexibles como para permitir que se incluya a todos los grupos en la ayuda, incluyendo inmigrantes.
Así como asegúrese de que las personas que están trabajando, pero que no pueden hacerlo desde casa, tengan el equipo de protección personal que necesitan para mantenerse lo más seguro posible.