Pamela Cruz. Península 360 Press [P360].
A partir del jueves, 6 de mayo, San Francisco reabrirá bares y actividades de entretenimiento familiar al interior, así como eventos deportivos comunitarios organizados al aire libre y saunas y baños de vapor interiores, luego de que la ciudad pasara este martes a nivel «Amarillo» en términos de restricciones debido a la pandemia por COVID-19.
Así, una de las ciudades más importantes en el estado de California, flexibilizará las pautas para una variedad de actividades, que incluyen gimnasia, cenas, oficinas, reuniones y recepciones
El anuncio lo realizó la alcaldesa London N. Breed y el director de salud, el Dr. Grant Colfax, quienes detallaron que San Francisco reabrirá y ampliará las actividades adicionales permitidas por el estado para los condados con transmisión mínima de COVID-19.
Con base al plan estatal para una economía más segura, San Francisco abrirá los pocos sectores cerrados que quedan y ampliará otros más con algunas excepciones, pues la ciudad se mantiene alineada con lo permitido por el estado.
Y es que, a partir de hoy, 4 de mayo, San Francisco ha cumplido con los criterios del estado para avanzar al nivel amarillo en función de sus casos de COVID-19, hospitalizaciones y otras métricas de salud.
Con esta medida, San Francisco ampliará casi todas las actividades al 50 por ciento de la capacidad interior, a menos que el estado requiera límites de capacidad más restrictivos.
«Este es un hito increíble para nosotros a medida que avanzamos en nuestro camino hacia la recuperación, y es posible debido a lo bien que lo estamos haciendo en nuestros esfuerzos por vacunar a todos los que podamos en esta ciudad y lo bien que la gente de San Francisco he terminado de escuchar a los funcionarios de salud pública», dijo la alcaldesa Breed.
«El Nivel Amarillo significa que ya no hay negocios que deban mantener sus puertas cerradas en esta ciudad, y significa que continuamos permitiendo que se realicen más actividades de manera segura con más personas», agregó.
Asimismo, refirió que, para mantener dicho progreso, es necesario que todos los habitantes de San Francisco mayores de 16 años, y con suerte, pronto, mayores de 12 años, se vacunen.
«Si bien sabemos que todos debemos seguir siendo cuidadosos, cuantas más personas estén protegidas, más podremos hacer», subrayó.
Además de la expansión de actividades, San Francisco está reabriendo por primera vez negocios que han permanecido cerrados.
Esta reapertura incluirá bares con servicio al interior al 25 por ciento de su capacidad hasta 100 personas, entretenimiento familiar interior como pistas de patinaje sobre ruedas y hielo, salas de juegos, parques infantiles y golf al 50 por ciento de su capacidad.
Además de bibliotecas al 50 por ciento de su capacidad, saunas interiores, baños de vapor, y jacuzzis al 25 por ciento de su capacidad.
Por otra parte, los eventos deportivos comunitarios organizados al aire libre pueden reanudarse con límites de capacidad de mil 500 a 3 mil personas dependiendo del estado de vacunación/ prueba de los participantes.
Además, como se anunció el lunes 3 de mayo, San Francisco flexibilizará los requisitos sobre mascarillas en entornos al aire libre con menos de 300 personas, incluido el comedor al aire libre, en consonancia con los CDC y la nueva guía publicada por el Departamento de Salud Pública de California.
Los nuevos casos de COVID-19 y las hospitalizaciones de San Francisco han mantenido un nivel constantemente bajo desde principios de marzo de 2021, y comenzaron a disminuir nuevamente a fines de abril, lo que permitió a la ciudad cumplir con los criterios para el nivel amarillo.
En este momento, San Francisco tiene un promedio de 26 casos nuevos por día, que es el nivel más bajo desde junio de 2020, antes del primer «aumento repentino de verano». En tanto que, por primera vez en más de un año, la cantidad de personas en el hospital con COVID-19 ha caído por debajo de 20.
Actualmente, el 72 por ciento de la población elegible de San Francisco ha recibido al menos una dosis de la vacuna COVID-19, casi el doble del porcentaje de personas vacunadas hace seis semanas cuando la ciudad se estaba moviendo al nivel naranja.
Además, 86 por ciento de los residentes de la ciudad mayores de 65 años han recibido al menos una dosis de la vacuna COVID-19 y el 73 por ciento están completamente vacunados.