De la guerra contra el olvido a la lucha por la vida
El 1 de enero es una fecha de gran importancia para América Latina y el Gran Caribe. No sólo se celebra el comienzo de un nuevo año, se trata también de una fecha emblemática para las luchas de nuestros pueblos.
El 1 de enero de 1804, luego de 12 años de guerra, el pueblo de Haití conquistó su independencia. Se trató de la primera revolución anticolonial que triunfó en el continente. Casi siglo y medio después, el 1 de enero de 1959, también en el Gran Caribe, se concretó el triunfo de la revolución cubana, un movimiento que nació antiimperialista y que pronto se volvió también socialista.
Más tarde, el 1 de enero de 1994, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional declaró la guerra contra el olvido al Estado Mexicano. La apuesta del zapatismo pronto tomó un rumbo más claro: sin soltar las armas, apostaron por construir escuelas, clínicas, hospitales, por el reparto de las tierras recuperadas, por la autogestión, el autogobierno y la autodeterminación territorial. Autonomía le llaman ellos, ellas y ell@s a esa forma en la que resisten y al mismo tiempo crean algo nuevo.
A lo largo de estos 28 años, el zapatismo ha construido una alternativa en la que se combinan los saberes de los pueblos y los conocimientos de otras resistencias. Articulando desde lo local hasta lo global, hoy la resistencia zapatista es reconocida en el mundo por ser una experiencia de gobierno desde abajo, de un mandar obedeciendo que abraza también las banderas del anticapitalismo, del antipatriarcado, del antirracismo y que lucha y alerta al mundo, como antes lo hizo Fidel Castro, de los riesgos que el colapso socioambiental significa para la humanidad.
Como en el pasado, los señores de la guerra y del dinero no toleran a quien se atreva a dar ejemplo de que otro mundo es posible. Por eso, con paramilitares y grupos criminales, pero también con la omisión y garantía de impunidad que ofrecen los tres niveles de gobierno, hoy los pueblos zapatistas siguen sufriendo la guerra.
Han pasado 28 años desde que el Ya Basta zapatista resonara por todo el mundo. Hoy los mismos pueblos mayas zapatistas nos invitan a dar una batalla que resulta crucial, la lucha en defensa de la Vida. Ya lo anotó en su cuaderno de apuntes el Gato-Perro: “O se está con el sistema o con la naturaleza. O con la muerte, o con la vida”.
¿Y tú, qué lado eliges?
Para saber más: https://bit.ly/EZLNyCNI
*Raúl Romero es Sociólogo, técnico académico en la UNAM.
