A tres años de las primeras órdenes de refugio en el lugar de COVID-19, la inversión del condado de San Mateo durante la pandemia fue de aproximadamente 360 millones de dólares en iniciativas de recuperación enfocadas en ayudar a los más afectados.
El total, aseguró el condado, incluye 188 millones de dólares para vivienda, 76 millones para seguridad alimentaria y más de 16 millones en ayuda financiera directa para individuos y familias.
En ese sentido, precisó que el apoyo financiero también se dirigió a pequeñas empresas, proveedores de cuidado infantil y programas para jóvenes.
«La pandemia arrojó luz sobre la brecha entre los que tienen y los que no tienen aquí en el condado de San Mateo», señaló Dave Pine, presidente de la Junta de Supervisores del condado de San Mateo. «Lo que hemos tratado de lograr con estas inversiones es enfocarnos realmente en programas y proyectos que aborden las necesidades más básicas de nuestra comunidad para cerrar esa brecha».
Por su parte, Peggy Jensen, subdirectora ejecutiva del condado, presentó un informe a la Junta esta mañana sobre la asignación de fondos de recuperación ante la pandemia en los últimos tres años después de que el COVID-19 dio lugar a numerosas órdenes de salud y otras medidas que afectaron a la economía.
La respuesta fue informada inicialmente por grupos de trabajo que se reunieron por primera vez en abril de 2020 para desarrollar estrategias para ayudar a la comunidad a hacer frente a lo que muchos temían sería una crisis económica.
Dicho grupo de trabajo, que involucró a docenas de organizaciones comunitarias, residentes, grupos cívicos y empresariales y otros socios, tenía como objetivo «construir un condado de San Mateo más equitativo, saludable y conectado» con apoyo para los residentes necesitados y esfuerzos de ayuda económica.
El condado precisó que aún queda un total de 36 millones de dólares sin asignar para problemas emergentes.
En materia de vivienda, subrayó que 26 millones de dólares fueron para asistencia financiera de emergencia para alquiler, servicios públicos y transporte respaldada por donantes privados, de la ciudad y del condado que ayudó a 8 mil 807 hogares; mientras que 109 millones se destinaron a la asistencia de alquiler de emergencia financiada por el estado que ayudó a 7 mil 400 hogares.
Además, 55 millones de dólares se movieron al Fondo de Vivienda Asequible, el cual generó 2 mil 500 nuevas unidades en la tubería de vivienda; 21 millones para la creación de viviendas para residentes sin hogar mediante la adición de 283 unidades de vivienda provisionales no congregadas y 52 nuevas unidades de vivienda permanentes; y 1.5 millones en viviendas para trabajadores agrícolas para un desarrollo de viviendas para personas mayores de más de 40 unidades que incluirá un centro de recursos para trabajadores agrícolas.
Hacia la seguridad alimentaria, se destinaron 64 millones a Great Plates, financiado por el estado y operado por el personal del condado proporcionó 2.9 millones de comidas servidas a 4 mil 683 adultos mayores; además de 3.9 millones a Second Course financiado por una asignación del condado de fondos federales de recuperación proporcionó 99 mil 600 comidas a 759 adultos mayores.
También, 8.5 millones de dólares se destinaron a Second Harvest Food Bank financiado por una asignación del condado de fondos federales de recuperación ayudó a proporcionar 37 millones de libras de alimentos distribuidos anualmente a más de 36 mil hogares.
Las pequeñas empresas y organizaciones sin fines de lucro también fueron apoyadas luego de que 33 millones de dólares fueron para éstas.
La asistencia financiera incluyó 16 millones de dólares de subvenciones para aquellos que no son elegibles para asistencia federal ‒subvenciones de mil dólares a 16 mil 017 personas‒ respaldadas por una asignación de 5 millones de fondos del condado.
Los más pequeños del hogar no fueron olvidados, pues de acuerdo con el condado, 4 millones de dólares fueron para el fondo de ayuda para el cuidado de niños; 870 mil dólares para el Consejo Coordinador de Cuidado Infantil .
Destacaron que 10.7 millones de dólares fueron para programas de enriquecimiento de verano, Expansión del centro de aprendizaje, cuidado fuera del horario escolar, respaldado por una asignación del condado de fondos federales de recuperación.
Para ayudar a ello, 6 millones se destinaron a 284 nuevos sitios públicos de Wifi, puntos de acceso en comunidades de bajos ingresos y servicios domiciliarios.
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