Por Marcos Eusebio Gutiérrez
Mi primera contribución a este medio quiero que sea una oración a la Madre Muerte, no la Santa Muerte sino la Madre Muerte, hay gran diferencia.
En el futuro, mis artículos serán de noticias contemporáneas. Pero hoy aquí va.
Madre Muerte que persistes en la eternidad y en el universo y que recoges a todos tus hijos eventualmente en esta tierra, escucha mi oración que me salió del corazón y es para pedirte perdón.
Perdón a nombre de todas las sociedades que te hemos comercializado, demonizado, y te hemos pintado como la “flaca calaca fea” que llega escondida en la oscuridad y se lleva a inocentes niños y niñas, hombres, mujeres y todo lo demás, y deposita sus cuerpos en la máquina de polvo y sus almas en diferentes partes del universo dependiendo de su comportamiento terrestre.
También Madre Muerte, perdona a todos los que al verte llegar, rezongamos, gritamos, lloramos y, a veces, hasta te insultamos.
Perdona de igual manera a aquellos que por sus acciones impensadas te llaman y a veces te encuentran antes de tiempo.
Madre Muerte, te pido nos ayudes a comprender que solo eres el último capítulo de esto que llamamos la vida y que en vez de lo que nos hemos inventado, nosotros mismos al pasar de los años, los meses, semanas, días, horas, minutos, segundos, nosotros mismos Madre Muerte nos convertimos en ti. Amén.
Bueno, bien dicen que la importancia de las cosas es la importancia que le damos.
Gracias por su atención y hasta la próxima.
* Marcos Gutiérrez es periodista y locutor. Conduce Hecho en California en radio KiQi 1010 AM, San Francisco.